Juan Rivera convocó a los medios de comunicación el pasado fin de semana para pedir una disculpa pública por el pleito de sus hermanos.
Además, para decir que él ya no va a ser parte de ese “circo de errores” y pidió a Gustavo y Lupillo hacer lo mismo.
El artista dijo que fue el vienes cuando le “cayó el veinte” de lo que estaba pasando cuando su progenitora le llamó por teléfono muy angustiada para que se dejara ir a su casa debido a que Gustavo y Lupillo estaban por encontrarse y tenía miedo.
“Es una vergüenza que mi mamá piense que sus hijos no pueden estar juntos… me da pena y ahí dije ‘esto tiene que parar ya”, dijo el hijo menor de la familia Rivera.
Agregó que él ya no seguirá alimentando el pleito, aceptó que ha cometido errores y pidió perdón a su madre, hermanos y a los admiradores de la “Diva de la Banda”.
Sin embargo, el conflicto familiar está que “pica y se extiende”. Los dos hermanos “NO” han hablado cara a cara, pero sí han usado las redes sociales y cada uno ha dado su versión en diferentes programas de televisión.
Lupillo dijo que está sentido con su familia porque nadie le ha preguntado por sus hijos, quienes están asustados luego que Gustavo estallara en ira y arremetiera a batazos contra su camioneta, donde estaba su esposa y sus hijos.
Mientras que Gustavo anoche dijo en una entrevista con “Aquí y Ahora” que en su corazón hay muchas cosas acumuladas desde que los tres partieron a Monterrey a recoger los restos de la cantante.
Claramente dijo que Lupillo no subió a la sierra de Monterrey a ayudarlos a poner la cruz, que los tres hermanos construyeron, porque prefirió ir a grabar la canción “Yo te extrañaré”, la cual dedicó a su hermana muerta.
Gustavo dijo que le dio tristeza escuchar eso debido a que “no era el momento para hacerlo” ya que ni siquiera habían identificado los restos de la estrella.
También lo llamó cobarde ya que no tuvo agallas de identificar los restos de su hermana y él y Juan lo hicieron. También fue él quien arregló los últimos detalles dentro del féretro.
Lo que derramó el vaso de agua fue una serie de fotografías que Lupillo filtró a la prensa y que dice eran muy personales para los tres hermanos.
Gustavo cree que su hermano Lupillo quiere ser el protagonista de la situación.
Veamos lo que ocurre en el próximo capítulo de esta telenovela, donde se espera que Lupillo responda a las declaraciones de su hermano y siga dando de que hablar.
Lo cierto aquí, es que la señora Rosa, madre de los hermanos, es la que pierde. Todavía no puede superar la muerte de su hija y ahora tiene la pena de ver el distanciamiento de sus dos hijos.
Por lo pronto, Juan les pide que ya dejen de estar usando las redes sociales y la televisión para alimentar el problema ya que “los trapos sucios deben lavarse en casa” y confía en que pronto “se sienten todos como familia, hablen como hermanos y aclaren la situación”.